Kaijus: Monstruos y Leyendas
Por Omar Piña
Con el reciente estreno de Godzilla y Kong: El nuevo imperio (2024) y el éxito en crítica de Godzilla Minus One (2023), los grandes titanes han resurgido desde las profundidades del océano y los rincones más remotos del espacio; sin embargo, no muchos saben el origen de estos enigmáticos personajes.
Los conocidos como kaiju han sido una fuente inagotable de fascinación para los amantes del cine y la cultura popular en general con personajes tan emblemáticos como Godzilla, Mothra o King Kong. Pero, ¿qué son exactamente y cuál ha sido su impacto? Exploraremos el fascinante mundo de estos seres..
Orígen de los Kaijus
La palabra kaiju tiene sus raíces en Japón, donde significa “bestia gigante”. Estas criaturas monstruosas son un elemento central en la mitología japonesa, en la cual se les representa como seres colosales capaces de destruir ciudades enteras con un solo paso. Sin embargo, el término kaiju se popularizó internacionalmente gracias al cine de ese país, especialmente a través del género conocido como kaiju eiga o películas de monstruos gigantes.
El género surgió en la década de 1950 en Japón, en un contexto marcado por los efectos de la Segunda Guerra Mundial, la bomba atómica en Hiroshima y Nagasaki, y la posterior ocupación estadounidense.
Godzilla, creado por el estudio Toho, fue la primera gran estrella de este género. La película original de 1954, dirigida por Ishirō Honda, presenta al monstruo como una criatura radioactiva que emergía del océano para sembrar el caos en Tokio. El filme no solo fue un éxito comercial, sino que también se convirtió en un fenómeno cultural que inspiró numerosas secuelas y spin-offs.
Más allá de la destrucción
Si bien es fácil considerar a los kaiju simplemente como monstruos destructivos, muchas de estas películas van más allá de la simple acción y el caos. En muchas ocasiones, los kaijus representan metáforas poderosas de problemas sociales, políticos y ambientales.
Por ejemplo, en Godzilla de 1954, el monstruo representa las secuelas del bombardeo atómico de Hiroshima y Nagasaki, mientras que en Shin Godzilla de Hideaki Anno (2016), toma una ruta crítica contra el gobierno de Japón por su ineficiente respuesta ante el desastre nuclear de Fukushima, tras el terremoto de marzo de 2011.
El Renacimiento de los Kaijus
Aunque el género kaiju eiga experimentó su época dorada entre las décadas de 1950 a 1970 nunca ha perdido por completo su popularidad. De hecho, en los últimos años ha habido un resurgimiento de interés por ese género cinematográfico, impulsado en parte por los avances tecnológicos y una visión más autoral en estas nuevas versiones.
Largometrajes como Pacific Rim (2013) de Guillermo del Toro y las antes mencionadas Shin Godzilla y Godzilla Minus One o incluso el influyente anime Neon Genesis Evangelion (1995), han llevado cada vez más lejos las narrativas sobre estos personajes, con temáticas cada vez más complejas y un mundo mucho más rico.
Los monstruos son seres trágicos.
Los kaijus son mucho más que simples monstruos gigantes en el cine. Representan temores profundos que reflejan los problemas de la sociedad y han dejado un legado duradero en la cultura pop. Ya sea que estén luchando contra otros monstruos, defendiendo la Tierra de invasiones alienígenas o simplemente causando estragos en las ciudades, los kaijus continúan fascinando a las audiencias de todas las edades y de todas partes del mundo.
Una frase de Ishiro Honda, creador del mítico Godzilla, nos recuerda lo tridimensional que pueden ser estos titanes: “Los monstruos son seres trágicos. Nacieron demasiado grandes, demasiado fuertes y demasiado pesados. No son malvados por opción. Esa es su tragedia”.
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